Esteban preparaba su maleta, listo para irse de vacaciones a un pueblo exótico por unos cuantos días, buscaba pasar un tiempo buscando paz dentro de sí después de algunos días tormentosos. Recién acababa de terminar una relación bastante caótica y lo único que buscaba era tranquilidad, la opción más absurda pero a la vez efectiva era alejarse de todo, aquello que lo tenía sujeto en la profundidad de su cabeza.
A 14 Kilómetros de distancia Mónica preparaba su equipo para ir a trabajar en un proyecto. Cargaba con su réflex recién adquirida así como un par de lentes, unos cuantos filtros y lista para tomar la carretera hacia el lugar donde empezarían a tomar las imágenes para su tarea. Después de un semestre bastante pesado lo único que esperaba era descansar un poco, lo cual al parecer no lograría.
Tomo su teléfono y llamo a un taxi, aun no tenía el boleto para el viaje, pero eso no le quitaba la idea de no regresar hasta que las vacaciones terminaran. El centro del país no era tan malo después de todo y bien salir del caos de la ciudad le vendría bastante bien a Esteban. Encendió su último cigarrillo que le quedaba y espero unos minutos más. Termino y salió de casa, cerro con llaves, bajo las escaleras y se sentó sobre su maleta esperando que el taxista pasara por él.
Mónica termino de preparar su equipo y bajo rápidamente, su novio la esperaba para irse juntos hacia aquel municipio de las afueras de la ciudad, él mismo fue el que le recomendó ese lugar para su proyecto. Desesperado tocaba el claxon para presionar a su pareja, ya era casi medio día y si querían llegar y trabajar con una buena iluminación no podían demorarse más. Ella salió de su hogar, cerro con llave, abrió la puerta del auto, saludo a su novio con un sensual y amoroso beso y despegaron hacia su destino.
Pasaron 10 minutos y Esteban seguía esperando al taxista el cual se rehusaba a pasar por él. Regreso a su piso y tomo la decisión de mejor viajar en su coche ¿Cuál era el problema? Era una mucha mejor distracción. Marco rápidamente a un amigo de la carrera y le comento su plan, Esteban buscaba un cómplice. Joel rechazo la invitación pues era muy apresurada su invitación y no podía irse al menos hasta dentro de dos días, para Esteban no fue suficiente y decidió irse solo. Era momento de la aventura. Bajo y reviso el aceite, agua y llantas de su coche, abrió la cajuela para subir su maleta y salió.
La pareja viajaba rumbo al sur de la ciudad, pasando las avenidas rápidas para navegar con mayor fluidez. Ese Volkswagen rojo iba a toda marcha para alcanzar el mejor espectro de luz posible en ese municipio, lo cual Mónica buscaba. Cantaban una canción que sonaba en la radio a todo pulmón. Llegaron a la avenida final antes de salir por completo de la ciudad y decidieron parar en un OXXO por unos refrigerios antes de partir; botanas, galletas y sodas, lo normal para un viaje.
Esteban iba manejando a toda máquina, su pequeño Chevy Monza tiraba más de lo que normalmente estaba acostumbrado pero él no lo sentía, la adrenalina de los días pasados junto a la emoción de hacer un road trip por su cuenta y completamente solo le llenaba la cabeza con pura y mera euforia. Tomo las avenidas principales hasta llegar al fin del camino de la ciudad para llegar a la carretera, igual iba hacia el sur. Se dio cuenta que si pensaba viajar 7 horas de camino en soledad necesitaría además de su ya cargado iPod con una gran cantidad de música, una cajetilla de cigarros y unas cuantas Coca-Cola. Paso un OXXO al darse cuenta de ello así que siguió derecho hasta el siguiente que no estaba más que unos 5 minutos después.
Mónica y su novio compraron lo que necesitaron y volvieron a tomar el coche, se pusieron el cinturón para tomar su camino.
Después de su necesaria parada salió de la tienda y encendió el primer cigarrillo de su viaje. No esperaba nada de él, no quería encontrar respuestas, no buscaba paz interior y ya tampoco quería divertirse, solo quería escaparse de ahí, no quería escuchar nada de Monterrey por unas cuantas semanas. Abrió la cajuela y se sentó un rato para disfrutar su cigarro antes de empezar, veía hacia la carretea y los coches pasar, vio un Volkswagen rojo con una pareja dentro y cruzo mirada con la joven que estaba de copiloto en el auto la cual se veía bastante feliz.
Ellos no sabían que en un futuro su vida coincidiría. De haber pasado en ese momento no les habría tocado vivir lo que ellos tenían reservado en su historia. Es curioso cómo funciona el destino.