8 de mayo de 2012

No me gustan, no me gustan los cumpleaños

Nunca fui el niño que esperaba ansioso su natalicio, todo debido a que toda mi infancia mi cumpleaños caía en vacaciones de verano por lo que jamás pude hacer una fiesta propiamente dicha con mis amiguitos de la primaria pues yo esas fechas las pasaba en Monterrey con mi familia.

Así es, nunca tuve una fiesta de cumpleaños infantil que haya sido memorable o al menos, como el estereotipo infantil.

Por supuesto mis papás y familiares me festejaban, pero seamos realistas quien chingados quiere celebrar su cumpleaños con tus tíos y primos que son por lo menos 10 años mayor que tu, niños que no conoces pero son hijos de señores que tampoco sabes quienes son pero al parecer tu familia si.

Esta condición genero en mí un bloqueo sentimental hacia la fecha en la que nací pues realmente jamás significó algo más. No fue sino hasta la preparatoria que por fin coincidió que la fecha estuviera dentro del periodo de clases pero ya era demasiado tarde para mi, yo lo único que quería era sentarme en mi jardín, subir los pies a la mesa, encender un cigarro y abrir una cerveza, casual, como cualquier otro viernes por la tarde.

Es un sentimiento raro pues no me gusta que me feliciten, no me gusta que me den abrazos y a menos que el regalo sea plumas fuente, Moleskine, cerveza, vino o single malt, (lo cual quiere decir que, en efecto, me conocen bien) tampoco me gusta recibir nada. Es un día como cualquier otro y ya, al menos para mi después de tantos años de bloqueos.

Desafortunadamente la misma ausencia del sentimiento de it’s my birthday! :D genera que sea igual de apático a cumpleaños ajenos, simplemente no puedo entender porque es motivo tan importante para otros, no cabe en mi cabeza.

Se vuelve aun mas difícil porque, al menos por compromiso, intento dar su felicitación, abrazo y tal vez hasta regalo, pero pocas veces lo he hecho con empatía, a veces hasta se hace incomodo. Eso se multiplica x100 cuando es una persona con la que no me llevo muy bien, la acabo de conocer o simplemente no significa mucho para mí. Esos momentos los siento todavía mas incómodos pues no se que chingados decir, no se que chingados hacer y solo veo la oportunidad para escaparme de ahí después de haber cumplido con el abrazo y el intercambio de palabras.

Yo sé, todo el mundo me encuentra desagradable, pero es de esas cosas que nunca pude superar.

Yo por lo pronto espero pasar mi cumpleaños (para el cual todavía falta) sentado en el patio (ya no tengo jardín, snif), subiendo los pies a la mesa, fumándome un Gold Rush y tomándome una Double IPA, casual como cualquier viernes por la noche.


Nos estamos leyendo
Eslem Torres

4 comentarios:

  1. Maldito dia...para mi es un martirio... al igual que a ti, desde que tantos años de bloques(Producto de decepciones).Tampoco me gusta ese dia... Me deprimo...

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  2. También lo odio. Hoy es mi cumpleaños y me pasa exactamente igual. Me reemputa que me feliciten, y por más de que les digo que no lo hagan parece que lo hacen a proposito.

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  3. Tamos iguales.... pero bueno toca adaptarse... Acoplarse a las costumbres de la sociedad... Hoy es el dia de la mujer... y lo único es lo que se recibes jajajaja... pero me da igual este día... como el día de cumple o cualquier otro evento...

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