23 de abril de 2011

First Date Mullet

Ok, ya estuvo bueno, me he aventado demasiados post sobre cerveza y aunque han atraído a mas lectores a este blog y es un tema que me encanta y me emociona, este NO es un blog sobre cervezas (aun) así que vamos a retomar un poco los inicios y vamos a hablar un poco sobre relaciones humanas, en especifico, las primeras citas.

¿Recuerda alguno cuando estabas en secundaria y querías invitar al cine, a unos quince años a la feria a esa chava que tanto te gustaba pero no tenías ni idea (ni experiencia) sobre como pedírselo? Uno es ingenuo en esa etapa, y la riegas mucho ¡y eso está con madres! Uno aprende mucho de estarla cagando. Luego llegabas a preparatoria (espero con más experiencia) y ahora ya la invitabas que al cine, que a cenar, que por una michelada (y ni me juzguen que ustedes igual a esa edad ya tomaban) o simplemente a dar una vuelta en el coche, ya que tampoco me lo nieguen, cuando tus papas te empezaban a soltar el carro te chiflabas.

Ahora, quiero creer que la mayoría rondamos la etapa esta de la universidad, los 20’s y ese lapso en que ya no eres tan inmaduro como un puberto pero sigues sin querer sentar cabeza. Entonces todo sigue siendo igual, conoces a una chava, te parece interesante, divertida y con una buena historia que contar y claro quieres salir con ella para conocerla y ver si esa idea que tienes sobre ella es verdad (si, si, si también aplica al revés). Y ahora, aquí depende mucho de la persona que vas a invitar si te vas a sentir nervioso o no, y aquí les va el porqué.

Primero, puede que tu ya seas el Stiffmeister y tengas toda la confianza del mundo sin embargo, aquí es donde cambia dependiendo quien sea la otra persona. Si lo único que esperas al invitar a salir a la chava es una buena conversación, divertirte un rato y conocerla tal vez te sea indiferente y te lo tomes todo con mucha tranquilidad ¿Por qué? Bueno, no estás preocupándote de que vayas a gustarle, de que vaya a haber una segunda cita, de que va a pensar de ti, etcétera, etcétera ¿si me explico? Estas más suelto, tienes más libertad y puede que todo salga hasta mejor y ya ligues ahí, todo gracias a que no tenias la tensión de tu parte, es mas puede que hasta tenga novio la chava y te va a valer madres porque tu intención no es robársela a nadie, es solo tener una buena charla. Este caso es absolutamente mi favorito.

Ahora supongamos que es una chava que te tiene clavadísimo, es tu amor platónico numero perdí la cuenta y después de que te cacheteaste a ti mismo varias veces y te decidiste a invitarla a salir. Híjole tu corazón empieza a volverse loco, tu presión sube, te pones nerviosísimo, primero no sabes ni como invitarla, ni donde, ni que puede pasar, conozco el sentimiento, todos lo conocemos. No importa que tanta experiencia tengas SIEMPRE va a pasar lo mismo. Es curioso verdad, cuando no esperamos nada todo sale mejor, de ahí él porque dicen que cuando las cosas son sin planear salen mejor.

Ahora ¿Quién creen ustedes que se ponga más nervioso en las primeras citas? La respuesta es parecida a la anterior, el nervioso siempre va a ser el que tiene interés en la otra persona. Sencillo y sin más alboroto, piénsalo así, el chavo de tus sueños te invita a comer, el no tiene ningún interés en ti solo quiere una buena compañía, por lo tanto el estará tan libre y soltado como debería ser, pero tu amiga mía vas a ser un manojo de nervios. No vayas a decir algo inapropiado, no vayas ir mal vestida, no te le puedes lanzar muy rápido no vaya a creer que eres muy zorra pero tampoco ser tan cuadrada para que vuelva a invitarte alguna otra vez. Vaya si me entienden y en el hombre pasa casi igual.

Imagínate ahora en la mente del chavo que también pasa el “no debo ser grosero, tengo que contar buenas anécdotas, no ser cochino, ser respetuoso, como saber si la estoy aburriendo, de que tema hablar y la joyita del pastel ¿tengo que pagar la cuenta yo o no? En mi caso, cuando yo invito a alguien suelo pagar, si al contrario a mi me invitaron cada quien paga lo suyo, así me manejo yo. Y no me vengan con el típico de “aiiii noooooooo es que eso de que el chavo siempre pague es tan 1900’s” Puede que sí, pero a veces también nos gusta ser esplendidos, ahora tampoco esperen que las llevemos al Kampai cada fin de semana, sino se trata de sangrarnos ¡pos oye!

Todos hemos tenido citas exitosas, equis y unas catastróficas y estas son de las que más aprende uno, además te dan unas historias buenísimas que contar. Pero bueno, dejémoslo así, intente estar más relajados, menos preocupados y todo va a aflorar naturalmente, pero tampoco te confíes, normalmente solo tienes una oportunidad, si tienes un date con el amor de tu vida y la riegas, pues, tendrás que ir buscándote otra media naranja. Esta muy cabrón cambiar una mala primera impresión, se los digo yo que me ha pasado. Pero ándenle riéguenla también pa que aprendan y así tengan una historia que contarme la próxima vez que nos veamos.

Nos estamos leyendo
Eslem Torres Eriksson

2 comentarios:

  1. Hola Eslem sabes he leido bastante tu blog y me gusto mucho.. eso quería que supieras se despide Constanza Patiño (Chile)

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  2. Muchas gracias Constanza, me da mucho gusto saber que a alguien le gusta lo que escribo. Saludos.

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