Sangre x Sangre / Porque creo que el IMSS es mejor que el ISSSTE / Sigo con mi complejo de querer ayudar a todo el mundo

Si me sigues en Twitter o me tienes en Facebook habrás leído alguna vez que en las pasadas dos semanas he estado yendo mucho al hospital (al ISSSTE de Monterrey para ser más preciso) ya que desafortunadamente a una hermana de mi papá la operaron del corazón y pues he estado al pendiente desde que llego a la ciudad (viene de Tampico) hasta el día de hoy. Al parecer en mi familia somos de gran corazón, pero también lo tenemos frágil. Me refiero a que mi abuela murió de un paro cardiaco cuando estaba a mediados de sus 50’s, a mi papá lo operaron igual del corazón cuando estaba en la misma etapa (de la cual salió perfectamente bien, una increíble historia de hecho) y ahora a mi tía que ella ya está en sus sesenta y córrele. Estos nos ha hecho pensar a todos en ser un poco más frecuentes en los chequeos médicos, yo no tanto verdad porque estoy en mis dichosos 20’s, pero ya que este tocando los treinta ya me preocupare. Pero por precaución voy a evitar que me rompan el corazón seguido, ya les dije que lo tenemos frágil.

Posiblemente nuestro corazón luciría así.

A mi tía, como a todos en su caso, les piden cierta cantidad de donadores de sangre y plaquetas para la operación y aquí es donde pensé que el IMSS >> ISSSTE. Verán cuando operaron a mi papá hace ya 4 años en el IMSS igual le pidieron una cantidad definida de sangre y plaquetas, pero aquí es donde está el truco, sus donadores podían entregar la sangre en Ciudad Valles y con la hoja que les daban el aquí en Monterrey ya no tenía necesidad de andar buscando quien le diera sangre. Bastante útil para los foráneos que no pueden traerse el sequito de familiares a acompañarlo. Con las plaquetas fue lo mismo, no había necesidad alguna de traer a la gente para Monterrey.

En esa ocasión yo no pude donar plaquetas, ni sangre ni nada. Me engañaron de hecho mis papas, ellos me dijeron que iba a hacerlo por lo cual tenía que prepararme, o sea comer bien, no tomar, no fumar (de hecho en esa época no fumaba) cosas así. Yo en mi último año de preparatoria pues era difícil porque ya estábamos en los últimos meses y era el clásico que siempre andaba en la punta del pedo haciendo despedidas, fiestas, reuniones o cualquier cosa que fuera una buena excusa para tomar, pero lo hice, tuve unas dos semanas limpias y sanas para darle lo poco o mucho que pudiera para la operación de mi papá. Pero, yo en esa época aun era menor de edad, así que cuando ya habían pasado las fechas y yo tenía la duda les pregunte “Oigan ¿y mis plaquetas cuando me las quitan?” – “Nombre mijo, no puedes donar”.

Fue entre decepción porque yo también quería cooperar y algo de molestia porque me perdí de muchas buenas borracheras. Pero bueno ya no me podía quejar.

Ahora, la diferencia con el ISSSTE fue esta. A mi tía igual le pidieron unidades de sangre, e igual sus donadores se las sacaron en Tampico, pero, con la diferencia que esa sangre la tenían que mandar a Monterrey, ellas se la tenían que traer en una hielera. Por el amor de Dios ¿en serio? Al final no lo hicieron así, afortunadamente el ISSSTE tuvo un viaje de ahí hacia Monterrey y ya ellos la trajeron, pero no quita el hecho que es un método poco práctico. Con las plaquetas fue peor. Nadie le podía donar en Tampico, porque son más delicadas y tienen menos tiempo de vida (solo duran 5 días), por lo tanto tenían que ser donadas con unos dos días de anticipación aquí mismo en la ciudad.

Afortunadamente mi mamá y yo estamos en Monterrey así que ya tenía sus dos donadores de plaquetas, pero teníamos que hacernos exámenes y todo eso y a partir de ahí empezó las frecuentes entradas y salidas al ISSSTE.

Lo que yo me pregunto es ¿Por qué no pueden tener un sistema de banco de sangre para evitar estas cosas? Yo estoy encantado de estar donando sangre y plaquetas, pero ahora imagínate ¿personas que vengan igual de fuera y no tengan quien les done? Obviamente no van a parar la operación por eso, pero si metes en un problema al hospital porque se van terminando sus “reservas” de material. Ahorita comento algo más a profundidad sobre esto.

En fin ya que se acerco la fecha me conectaron a la maquina y me sacaron todo lo que pudieron, tanto de hecho que ya no ocuparon al otro donante de plaquetas porque conmigo tuvieron (así que ya saben cuando requieran acá unas plaquetas bien sanotas pueden hablarme). Después de eso todo ha sido ir y venir por la operación y ahora por ver cómo ha ido evolucionando mi tía. Afortunadamente la operación fue un completo éxito, pero ya tiene una semana en terapia intensiva y mientras siga ahí aun estamos con pendiente.

Y con esta pluma me hicieron llenar la hoja de datos. Curioso verdad.

Aquí la prueba

Bueno hasta aquí iba a terminar mi entrada y hacer una reflexión de que deberíamos donar más seguido y blablabla pero, aquí no termina la historia y hay un giro en la trama que hizo cambiar el fin de esta publicación. Así que déjenme continuar.

Algún lector de la vieja guardia recordara que alguna vez escribí una nota que se llamaba El Complejo de Querer Ayudar a Todo el Mundo donde hablaba de una experiencia que tuve donde hicimos una caridad pequeñita pero que nos lleno de satisfacción y daba a entender que a mí siempre me ha gustado esa sensación. Darle alegría a alguien es de los mejores sentimientos del mundo. Bueno, aquí entra otra vez esa sensación por una jugarreta del destino, además que me volvió a mostrar que el mundo es pequeñísimo.

En Ciudad Valles mi mamá conocía a una costurera con la cual iba algunas veces para que le hiciera arreglos que ella no podía (mi mamá también cose y teje un poco, pero hay cosas que no están en sus conocimientos) y así duro los casi 15 años que estuvimos viviendo en la ciudad. Bueno, acortando la historia resulto que en una de las idas al ISSSTE que hemos estado haciendo mi mamá se la encontró ahí, su historia es la siguiente.

Su nieto de 2 años lo iban a operar para sacarle unas bolas extrañas que tenía, para la operación igual ocupaban plaquetas y ellos NO tenían donadores. Obviamente la operación no iba a parar por ese detalle, pero volvimos a lo mismo que vas dejando sin reservas al hospital. Mi mamá me hablo inmediatamente y me dijo que YO iba a volver a donar plaquetas, yo me espante un chingo ya que lo primero que pensé es que algo había salido mal y que mi tía volvía a quirófano, pero no, solo era que iba a donar para el niño. Me toco la fibra con la historia y pues dije “a pinche awebo!” pero luego entraba la pregunta ¿puedo volver a donar si hace una semana me sacaron (y hasta de mas) plaquetas?

La respuesta era que sí, ya había hablado con el químico cuando me sacaron la primera vez, así que no había problema, solo tenía que volverme a hacer los exámenes para ver que anduviera bien en los niveles esos que ellos miden y volvía a entrar a la maquina. Fue al día siguiente a hacerme los estudios y todo salió bien, solo que hubo un problema, los martes que son los días que tengo completamente libres (y que era ideal para ir a sacarme las plaquetas, ya que es un proceso que dura entre hora y media y dos horas) estaba completamente lleno, así que quedamos en que me agentarían después.

Realmente mis plaquetas no las iban a usar para el niño, ya que en teoría al pequeño lo iban a operar un día antes de que me sacaran todo pero era para reponerlas. El problema es que en esta semana he estado bastante apurado en la facultad y no he tenido tiempo de echarme la vuelta para que me las sacaran, sin embargo no crean que me voy a sordear y no voy a ir. De hecho en esta semana voy a ir el martes a que me vuelvan a hacer el examen para así el jueves o el sábado me saquen las plaquetas. Ya no las ocupa el niño, pero pues es una deuda que hay que saldar, seguramente a alguien más le van a ser útiles.

La reflexión a la que quería llegar era que donáramos todos cuando pudiéramos, sangre, plaquetas o 5 pesos que dejes en los botecitos de la cruz roja, pero que lo hicieras por gusto, no por obligación, así a la fuera las cosas salen mal. Pero ahora creo que la quiero cambiar, hay gente allá afuera que realmente necesita ayudas como estas, cosas tan simples como estar en un asiento y que te saquen sangre en 15 minutos, pero para ti es un cuarto de hora para otras personas son días de estar buscando en una ciudad donde no conocen a nadie quien les pueda hacer el favor de donar.

Yo ya lo tengo visionado, para la próxima vez que vaya a donar de forma totalmente altruista (o sea que no voy por un paciente en especifico, sino que voy por mero gusto) voy a pedir que vayan para un paciente foráneo y de preferentemente que sea uno pequeño. Ver niños tan chicos en una cama en el quirófano es realmente triste. Creo que sería la única cosa con la que no podría ser frio. Nunca hubiera podido ser cirujano pediatra.

Por lo pronto yo hice mi donación y estoy a unos días de volver a hacer otra. Eso sí, plaquetas creo no donar otra vez en un futuro próximo (unos 6 meses) a menos que sea un caso especial como la del niño que les conté. Y como había escrito en la nota de #gettngslizzered me di un gusto con una cerveza de Dogfish Head, la 90 Minute IPA de hecho, de mis favoritas.

La 90Minute IPA, mi big-ass glass para cervezas "grandes" y atras mi licuadora de volver al futuro... si es viejita ¿y que?

Nos Estamos Leyendo.

Eslem Torres Eriksson